Protección de cultivos eficaz: resistencia al granizo, lluvia, viento y sol.
Diferentes medidas, tamaños y colores.
Tejidos con monofilamento de polietileno de alta densidad.
Las instalaciones de malla antigranizo son las más habituales en fruticultura.
Estos montajes se adaptan a las necesidades y requerimientos de cada cliente.
La protección de cultivos se efectúa con una armadura formada por postes (madera u hormigón), anclajes, alambres y una red que evita el impacto del granizo, con diferentes métodos de descarga.
Elige el sistema que mejor se adapte a tus necesidades
La descarga es directa por la apertura entre las plaquetas.
Sistema caracterizado por su vuelo plano gracias a los elásticos enganchados a las plaquetas y la línea de alambre cumbrera.